El pasado 22 de mayo cumplimos 13 años ininterrumpidos de promoción de lectura en voz alta en Cartagena de Indias, Bolívar y la región Caribe colombiana. Han sido 4.745 días en los que hemos sacado muchas sonrisas a los niños y a los que hemos ayudado a impulsar su imaginación y curiosidad por los libros.
Los maestros de cada una de las instituciones educativas han sido determinantes porque nos han permitido compartir con sus alumnos el catálogo de cuentos infantiles que hemos logrado armar a lo largo de estos 13 años.
En medio de esta temporada que nos ha mantenido en aislamiento por la pandemia del COVID-19, estas instituciones educativas también han podido compartir con nosotros el momento especial de “La Carreta Virtual”, con la cual hemos publicado todos los días la lectura de un cuento infantil, con el único objetivo de que nuestros seguidores y los maestros tengan contenido para poder compartir con sus alumnos y en el ámbito familiar.
La Carreta Virtual nace al reconocer que la pandemia nos ha cambiado la vida a todos y nos llevó a replantear nuestros hábitos cotidianos sociales. A partir de este momento nada será igual.
En LaCaLiLe estamos dando y daremos un vuelco total en nuestro portafolio de promoción de lectura en voz alta porque entendemos que el mundo no será igual, por lo menos en los primeros meses después que salgamos del aislamiento por la cuarentena.
En este momento, La Carreta Virtual es la que nos ha permitido llegar a nuestros lectores en cualquier rincón del mundo, y eso nos permite contarles algunas anécdotas sobre lo que ha transcurrido en medio de este ejercicio.
Una de las situaciones que más me ha gustado son los comentarios de los padres y maestros que nos envían vía WhatsApp en la que manifiestan la felicidad de los niños por escuchar y ver los cuentos que les leemos, por eso continuaremos con la tarea diaria de subir a nuestro canal de YouTube todos los días la lectura de un cuento infantil, desde el canal, lo compartiremos en el resto de nuestras redes sociales.
Otra anécdota es que como cortina al iniciar la grabación del video, en los primeros 7 segundos siempre inicio tarareando: tara ra ra ra tan ta ta ra ra ra, este tararear es algo que le ha gustado mucho a los niños y a los padres de familia, para mí fue una sorpresa el saber que lo que se me ocurrió para no salir “acartonado” en los videos, los niños tratan de imitarlo y además lo hacen con los cuentos que tienen en sus casas.
Es así como les puedo afirmar que continuaremos y trataremos de valorar cada segundo que tengamos para compartir con ese lector al que salimos a buscar con La Carreta física, la de siempre. Esperamos que pronto las cosas retornen a su cauce y poder pasearla en la búsqueda de nuevos lectores, que salga a realizar sus lecturas en las distintas instituciones educativas, para sacar una sonrisa con la lectura en voz alta de cuento infantil en cualquiera de sus modalidades.
Aprovecho este espacio para agradecer a los patrocinadores que hacen posible que esta carreta ruede por todas partes. Gracias también a los maestros y madres comunitarias de todos los sitios que hemos visitado, porque nos han dado la oportunidad de sacar una sonrisa con la lectura de un cuento. Muchas gracias a los lectores del mundo, que año tras año nos ayudan a empujar La Carreta con más ganas teniendo presente que hay un libro para cada lector.